Comenzaré por contarles que tengo un amigo que siempre me pone en aprietos cuando me dice – «Me encanta como te vistes» – y después de eso viene la terrible pregunta: ¿Cuál es tu estilo?
A lo que yo siempre contesto «Tomo todo y lo hago mío.«
¿Cómo explicarles de manera más sencilla?
De entrada me gusta verme bien, siempre y donde sea, pero tampoco me gusta disfrazarme al momento de ir a algún lugar.
Es por eso que a todo lo que visto, le pongo mi propio sello.
Mi manera de vestir, como la mayoría de ustedes, depende de mi ánimo, en ocasiones un par de high heels te levantan aunque tu humor esté por los suelos y en otras prefieres caminar cómoda y relajada en flats.
Sí tuviera que definir mi estilo con una palabra, esa sería ecléctico, mi ropa como mi forma de ser, siempre lo he dicho, es versátil y desenfadada. Sí me gusta, lo uso, si lo pienso, lo digo.
En lo personal, me gusta mezclar de todo, pero comprendo que existen ocasiones en las que no es tan fácil decidir un estilo o cuál sería la mejor manera de vestir para ciertos eventos.
Es por eso que cuando encontré «Los 5 tips para definir tu estilo según Purificación García«, quise compartirlos con ustedes.
1. Sé tú mismo. Déjate llevar por tu intuición.
2. Haz un repaso al armario. No vivas de recuerdos y recicla la ropa que ya no te pongas o que ya no te queda. Eso dará espacio a nuevas prendas.
3. Cuando compres ropa nueva, analiza la vida que llevas. Sí trabajas 80 por ciento y haces vida social de 10 por ciento, tu guardarropa debe de estar relacionado con esto. No puedes solo comprar vestidos de coctel sí no sales poco y tampoco muchos trajes sastres, sí no trabajas en una oficina.
Antes de comprar esa chaqueta de lentejuelas espectacular, piensa bien sí la vas a utilizar lo suficiente para que valga la pena adquirirla. Debes de ser coherente con tu estulo de vida para encontrar tu estilo personal.
4. Mira tus proporciones. Analiza los largos que te vayan y las siluetas que te sientan mejor.
5. El lujo obvio no es sinónimo de elegancia. Usa las cosas porque te quedan bien, por su calidad o estética, no porque este llenas de logos.
¡Perfecto!
Una vez considerados los puntos anteriores, no nos queda más que crear, así que les comparto dos de mis outfits en los que he utilizado mi Purificación García.